Hola amigos espero se encuentren bien, continuamos con la lectura a pesar de todo, mi consejo para todos ustedes es: no se desanimen luchen por lo que quieren pero sobre todo deben estar convencidos de lo que hacen. Sin más demora continuamos la lectura del libro El Anticristo de Nietzsche.
CAPITULO 52
Nietzsche
continua diciendo que el cristianismo solo se vale de una razón, pero está
razón es débil porque toma en cuenta todo aquello torpe y débil, narra aquí la
fe cristiana como “no querer saber qué es lo verdadero”. Otros atributos de los
dogmáticos son “la no libertad de mentira” y la “incapacidad para la filología”
(el arte de leer bien). Con estas palabras ridiculiza la manera en que los
teólogos explican cualquier acontecimiento. Piensa Nietzsche que si de verdad
existiera un Dios bueno, un Dios creado que nos curase a tiempo o impidiese los
males, habría que destruirlo por ser estúpido.
CAPITULO 53
Una
persona no se puede ser considerado mártir, si estas personas sufren es porque
no tienen forma para dar a conocer la convicción al mundo, solo los apóstoles y
otras pocas personas consideran que la verdad la puede poseer una u otra
persona, los mártires son una desgracia para la verdad, con sus propias mentiras
quieren venir y hacerse pasar por grandes personajes (crueles e imaginarias
mentiras), es decir la verdad del como todo hombre de Iglesia la entiende, es
la prueba de que el hombre aún no ha conseguido aquella auto superación que
resulta necesaria para encontrar cualquier verdad. Dice que la religión
cristiana ha basado parte de su verdad en los signos de sangre pero con ésta no
se manifiesta la verdad, sino que contagia la doctrina más pura, convirtiéndola
en alucinación y en odio de los corazones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario